Sinopsis: Peter Klaven (Paul Rudd), un exitoso agente inmobiliario, acaba de comprometerse con Zooey (Rashida Jones). El problema es que se da cuenta de que no tiene ningún amigo íntimo que pueda ser su padrino de boda. Trata entonces de remediar esta situación por medio de una serie de citas. Es así como conoce a Sydney Fife (Jason Segel), un chico tan testarudo como encantador y con el que inmediatamente se siente a gusto. Sin embargo, cuanto más crece esta amistad más se deteriora la relación de Peter con su novia, y llega un momento en que no tendrá más remedio que elegir entre ella y Sydney.

Crítica: Nos encontramos ante una de esas comedias románticas "para tíos" que hace ahora y que no dejan de ser una comedia de colegas con novias de por medio.

Sin embargo y pese a que el argumento resulta sumamente simple, Te quiero, tío es una comedia bastante redonda y con muchos puntos de humor.

La extraña pareja formada por Peter y Sydney, tan distinto pero iguales, dan pie a un montón de situaciones incómodas, extraños matices y malentendidos y dan respuesta a muchas de esas cosas como ¿qué coño hacen los tíos juntos cuando no estamos nosotras? Como bien dice Paul en el trailer, hacen el gilipollas pero se lo pasan muy bien y hablan de sus problemas, dudas y temas.

Los personajes están bastante bien y Jason Segel siempre le da un toque super humano y creíble que hace que todos los individuos que interpretan te resulten entrañables a su manera.

Me gusta mucho la sensación de colegueo que transmiten los dos y aunque no todos los chistes y gags funcionen la verdad es que te lo pasas tan bien que te da todo un poco igual.

Es una película sobre colegas que te divierte y que es correcta - aunque se vuelve un poco blandita al final, con las típicas cosas de las comedias románticas- y consigue que pases un buen rato y sueltes unas cuantas carcajadas.

La buena relación de amistad me recuerda un poco el buen rollo de Friends, así que consiguen esa sensación de hacernos creer que son amigos de tiempo. En cuanto al resto del reparto, hay grandes talentos de la televisión y conocidos a los que no se les ha sacado partido dando la sensación de que sus personajes son un simple acompañamiento para los principales cuando podrían haberse desarrollado más.

En todo caso y sin llegar a ser la mejor película de colegas del alma de la historia, está entretenida y divierte que es lo que se busca de este tipo de comedias.

Decir que mi chico fue capaz de verla sin dormirse ya le da algún punto extra, por lo menos en el entretenimiento.

Y finalmente, un resumen: